BDSM Barcelona

Somos personas y además cada un@ tiene su rol. Somos, podríamos decir…..más completos de lo normal.

Somos un solo cuerpo para dos seres distintos y cada uno lo utiliza a su voluntad, pero el fuerte es el débil y el débil es el fuerte. 

Si hablas de mi persona, con todo lo que he vivido, crees que para llegar donde estoy tengo que ser fuerte y no, solo soy la sombra de mi ser, no por eso dejo de ser alegre,  soñadora, divertida y muchas cosas más, pero en este lado mi alma y mi corazón són muy sensibles, quebradizos, débiles y necesitan a alguien fuerte que les sostenga y los llene. 

Y luego está la otra parte, la sumisa, la que representa es la débil, pero no, la sumisa es fuerte, no se doblega, aguanta el dolor y se crece, comparte y entrega.

Pero cuando no soy sumisa, o sea cuando soy persona, y veo lo que mi querida «inquilina» pretende hacer en nuestro cuerpo, pienso, está loca, madre mía cuanto dolor….yo esto no lo aguantaré……seré incapaz…….

Pero la realidad está muy lejos de mis pensamientos……. cuando nos lo hagan yo ya no estaré, porque  luego ya habrá aparecido la jodida novata de Queen y aguanta lo que le hechan y un poquito más…..y encima se rie!!!!

A quien se le explique…..solo alguien de este fantástico submundo sabe lo que es…..El dolor inglingido para un placer regalado hasta lo que parece mentira ser, dos personas en un solo ser. Dos personas tan distintas y que te lo dan todo, pero cosas tan distintas…. que cuesta de creer si no lo ves en tus propias carnes.

Yo, ya no soy persona……soy un ser…. un ser que comparte un cuerpo para vivir, para mostrarme, para existir.

Porque ya no concibo mi vida la una sin la otra. Y me queda todo por aprender, porque lo poco que he aprendido solo es la sombra de lo que puedo llegar a ser, de todo lo que puedo ofrecer a mi dueño, a mi Señor, a mi Amo.

Y entiendo que mi cuerpo ya no es mio ya no me pertenece, lo que tengo es un regalo, que lo tengo que proteger y cuidar como el más grande de los tesoros, para que Queen lo pueda mostrar y ser utilizada con todo su orgullo. Un cuerpo perfecto en la imperfección, pero cuidado en todo su ser, para ser idolatrado y castigado, para que la usen a volutad y se sienta una reina.

La vida no deja de sorprenderte día a día y cuando descubres este mundo, cuando sientes que perteneces a él, tu vida cambia y dejas de ser tu para ser las dos, tu vida anterior ya no tiene sentido y ya no hay vuelta atrás…ya para siempre no estarás sola y tu sumisa buscará dentro tu cuerpo a su otra mitad, porque ya cualquiera no será válido, será un ser nuevo al que pertenecerá para completarse he ir creciendo, haciéndose fuerte… para ser, complacer, vivir y entregarse completamente a quien realmente pertenece, su Amo y Señor.

Ya no hay vuelta atrás.