¿El BDSM sirve como terapia?
Escrito por Master_Bcn El: 12 enero 2017 , categoria Artículos, Visto 2229 veces
Algunos dicen que el BDSM puede activar las emociones que tenemos reprimidas y ayudarnos a procesarlas en un ambiente seguro, consensuado y de apoyo. Además, hay que tener en cuenta que el BDSM es una practica que requiere un buen equilibrio mental, una salud psíquica que pueda aportarnos la sensatez necesaria. para hacer realidad nuestros sueños fantasías y deseos ocultos.
Las personas que han sufrido algún tipo de maltrato, generalmente en la infancia, han aprendido a asociar el cariño con la violencia. Por ello sienten necesario e inevitable someter o someterse a las otras personas a las que aman, bien sea su pareja, amigos y familia. El sufrimiento y el mal trato cotidiano es algo que suelen asumir de forma natural, el sufrimiento puede llegar a ser tan vital como respirar.
Entonces suelen asociar el amor y la violencia como sentimientos indivisibles, siendo propensas a caer de adultos en relaciones destructivas. En estos casos entrar en una relación BDSM puede ser una forma de liberarse a los estímulos que le dan miedo, encausando esta tendencia auto destructiva y violenta de una manera constructiva, siempre y cuando sea controlada lenta y progresivamente, ayudando a combatir el estrés postraumático.
Este tipo de relaciones puede ayudar a personas que tiene dificultades para cuidar de si mismas, incluso para enfrentarse a los retos de la vida cotidiana, ya que se logra que sean capaces de quererse a si mismas tal como son.
Es importante reconocer que también hay un vínculo muy fuerte entre el placer y el dolor, ya que el dolor estimula la liberación de endorfinas y adrenalina, que en conjunto pueden combinarse para estimular tanto el cuerpo creando una sensación de euforia y placer.
El BDSM con frecuencia implica el uso de dolor junto con la estimulación sexual, y por lo tanto algunas personas suelen sentirse bien al infringirles dolor controlado asociados con el sexo , lo que les permite reprogramar sus cerebros para que acepten que el sexo puede ser una experiencia placentera.
El BDSM puede ayudar a que se mantengan centradas en una situación actual , sin que tengan que recordar escenas de experiencias traumaticas o recuerdos negativos asociados con el sexo o la sensualidad, permitiendo a través del dolor controlado permanecer en el aquí y ahora, experimentando excitación sin ninguna connotación negativa de experiencias del pasado.
Otro aspecto potencialmente curativo asociado con BDSM es la capacidad de expresar la ira reprimida de una manera segura. Durante un abuso sexual o de violencia tipo bullying o mobbing, muchos de las personas no son capaces de expresar sus sentimientos acerca de lo que se estaba sucediendo. ya que no pueden expresar su pesar por lo que están sintiendo no pudiendo luchar lo suficiente, o no mostrar el enfado por lo vivido, por que quizá no era seguro hacerlo. reprimiendo la ira y permaneciendo latente durante un tiempo considerable.
En una relación BDSM controlada correctamente, la sumisa/o puede encontrarse en una situación en la que están siendo dominada, pero esta vez, si es capaz de expresar su ira por lo que les está pasando, y por lo tanto liberar esa ira . En este sentido, esta situación también puede dar lugar a una re-escritura del guión y ayudarle a restablecer el control de si misma.
En esencia, esta situación puede permitir que el sobreviviente a un abuso exprese su ira en una situación en que estimen que sea admisible y comprensible liberándola de la misma y de otras situaciones donde hubo abuso o violencia.
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Bajo mi humilde opinión, no tengo claro que el BDSM sirva como terápia, y en eso caso el daño psicológico que se le puede crear a esa persona puede ser peor, por ser una persona que se siente bien en el rol de Dominante no me considero un psicólogo ni alguien capacitado para ofrecer terapias.
He conocido a algunas sumisas que si habían sufrido maltrato en la infancia, adolescencia o como adultas, algunas físico otras psicológico. No sé si llegaron al BDSM como forma de equilibrar ese trauma, o por sus propias pulsiones. Sería muy aventurado por mi parte sacar conclusiones. Tampoco sé si el BDSM les sirve como terapia. Lo que si les sirve, como dice el artículo es como un campo donde poder expresar, liberar y practicar aquello que se ha despertado, placer y dolor sin que sea contradictorio o negativo. Aún así siempre he sido muy cauteloso ante sumisas que vienen con esa carga. No tanto por mi, sino por ellas, pues al final uno no sabe si puede mejorar o empeorar los traumas que tienen. Pienso en los Dominantes que vienen con una carga similar, o otro tipo de traumas. Me parece verdaderamente peligroso y me consta que hay. Y no creo que para ellos el BDSM sea el mejor sitio para terapia, ni como práctica donde poder expresarse. Por el daño que pueden llegar a ocasionar, que puede ser mucho. Saludos.
Pues yo creo que tiene toda la razón. No somos conscientes de los traumas que llevamos dentro. Los peores los reprimimos en el inconsciente, en lo que Carl gustav Jung llamó "la sombra" que es donde guardamos inconscientemente lo peor de nosotros mismos, lo que no podemos aceptar. No se puede generalizar pero hay muchos mas traumas inconscientes de los que creemos.
Gracias por el artículo máster, un saludo
Concuerdo totalmente, muchas personas que están dentro del bdsm han sufrido traumas o abusos y han encontrado una forma de controlar sus miedos y hacerse más fuertes, no lo digo yo, dicho por compañeros que tengo que han tenido esas experiencias negativas en el pasado, y el bdsm los equilibra. No quiero decir con esto aurum que otros encontramos también el equilibrio aún sin haber vivido esas experiencias traumáticas.
Ufff..perdón, pero no creo que sea bueno eso.
el articulo va dirigido a personas que arrastran algún trauma de abuso Airun no a todas las sumisas o dominantes, no generalisemos
Yo no tengo ningún tipo de problema traumático...No sé, me resulta raro que alguien que ha sido maltratado o abusado de pequeño encuentre en el Bdsm una manera de liberarse. Yo me someto libremente, por que mi cuerpo y mi mente así lo desean y eso hace que me reafirme como mujer y sumisa. Me ha hecho más fuerte y como he comentado, no tengo ni un trauma psicológico.
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