BDSM Barcelona

Generalmente un maltratador tiende a ser una persona aislada, que no se relaciona mucho con los demas, es celoso hasta de su propia sombra, tiene una baja autoestima, que le ocasiona frustración y la frustración trae violencia. Además, tiene unas expectativas rígidas de su rol sexual como hombre. Este es el típico dominante, pero que en realidad esta tapando un complejo de inferioridad y baja autoestima.

El típico comportamiento de un maltratador es ir acosando a su victima, reduciendo su libertad y aislándola progresivamente de su familia y entorno social. Ademas hace que su victima se sienta insegura y que su autoestima vaya decayendo haciéndola poco a poco mas dependiente de el.

Un maltratador puede tener los rasgos egocéntricos, ser exigente, posesivo, estar siempre de mala leche ridiculizando o humillando incluso públicamente a su victima, llegando a ser muy violento y agresivo. El silencio también se puede utilizar como una táctica de abuso emocional.

Cuando todas las tácticas anteriores fallan, el abusador suele recurrir al victimismo, haciéndose pasar por la victima de la relación lo que hace que le terminen compadeciendo, incluso hacerle sentir mal a la verdadera victima cuando en realidad no ha hecho nada, pero dejando  un sentimiento de culpa para luego manipularle sin que se de cuenta.

En el ámbito BDSM por su misma naturaleza de los juegos pueden servir para camuflar o propiciar los maltratos, la victima debe ser capaz de distinguir cuando lo que se practica es algo licito del juego ya sea por que  a sido pactado y consensuado.

Rasgos frecuentes del Amo maltratador:

• Si el dominante reiteradamente fuerza los limites pactados por la sumisa
• Dejar de lado o desatender la palabra de seguridad
• Manipular psicológicamente a la sumisa para crearle sentimientos de culpa
• Alejar a la sumisa o presionarla para que rompa con su circulo social y/o familiar
• Prohibirle hablar con nadie sobre lo que sucede en su relación D/s
• Tener celos enfermizos con la sumisa
• Después de algún castigo no proporcionarle el aftercare o muestras de afecto
• Intentar introducir el consumo de drogas y/o estupefacientes dentro de la practica BDSM, para alterar la conciencia y el dominio de sus acciones y voluntad de la sumisa
• Extender las reglas del juego D/s mas allá del tiempo pactado.
• Alterar y ampliar las reglas pactadas de manera unilateral aduciendo que la sumisa tiene que ampliar sus limites

Ante estas circunstancias la sumisa debe de identificar las señales y actuar cortando por lo sano, rompiendo la relación D/s, o encausando la relación hasta que se vuelva sana, ya que el gozo y disfrute debe de ser compartido por ambas partes.